Mierda… Bye Bye!

¡Hola hola!

¿Qué tal va la vida?

Estoy segura que bien.

Bienvenido a ‘El Blog de Ángela’ donde mis pensamientos, elucubraciones, teorías y experiencias mundanas quedas expuestas.

Por si es tu primera visita al blog, decirte que todo lo que escribo es cuestionable totalmente. Mis entradas no son tesis doctorales ni perlas de sabiduría ancestral, solo mi materia gris haciendo ejercicio para fortalecerse.

El tema de la entra de hoy es:

‘Mierda… Bye Bye’

Con este título quizá pueda parecer una entrada con un toque de humor, y creo que sí puede tenerlo, aunque también mucha utilidad ‘desde mi punto de vista’.

Hace unos días, en mi trayecto en autobús camino al trabajo, mi cabecita pensaba…

‘Menos mal que nuestro cuerpo está automatizado y funciona perfectamente solo, sino estaríamos muertos. Deberíamos aprender de él’.

Pues analizando un poco más en esto, terminé enfocando cómo el cuerpo gestiona lo que le sobra, los residuos, lo que ya no es útil interiormente para ninguno de sus órganos, lo que ‘mejor fuera que dentro’ porque si no sale… genera gases, dolor, estreñimiento y quizá hemorroides o cosas peores.

El cuerpo crea una masa de mierda con todo lo inservible, con todo lo inútil y a diario (si la salud del cuerpo es óptima) lo expulsa.

Una vez fuera… nunca más se supo de esa masa de materia mierdosa.

Realmente el cuerpo cuando deja salir ‘eso que NO le interesa’ se olvida totalmente de ello.

Nunca más vuelve a pensar en la mierda que dejó ir la semana pasada, el 25 de agosto o hace tres años.

‘Mierda…. Bye, bye’

¿Por qué LECHES no hacemos igual nosotros?

¿A qué me refiero?

Pues a nuestras mierdas mentales, nuestras mierdas familiares, nuestras mierdas laborales, nuestras mierdas amorosas…

Todas esas cosas que son inservibles, que no son útiles, que nos perjudican y nos pueden llevar al estrés, a la tristeza más absoluta, a la infelicidad o nos pueden provocar alguna enfermedad.

Hagamos una masa con ellas y expulsémoslas de nuestra mente, de nuestros recuerdos, de nuestras emociones.

¿Cómo?

Pues, se me ocurre escribir en un papel TODO lo que nos salga de dentro respecto a eso que debemos expulsar de nosotros.

Sin limitaciones, sin censura, sin cortante un pelo, dejando salir la ira, el rencor, el odio, y todas esas emociones negativas que ‘lo que vamos a eliminar’ nos genera.

Mi sugerencia, además, aportaría un punto de creatividad, incluyendo colores fluorescentes que puedan resaltar algunas palabras que nos apetezca destacar o incluso dibujos explicativos… lo que se nos ocurra.

A ese papel le podemos dibujar el contorno de una mierda ‘estilo emoji’ y lo quemaremos hasta reducirlo a cenizas, que obviamente tiraremos a la basura, al retrete o podemos usarlo de abono para las plantas.

Momento en el cual ESO dejaría de ser algo en lo que pensar el resto de nuestra vida.

¿Qué te parece?

¿Hacemos limpieza?

Anímate.

Además, y teniendo en cuenta lo que dice el refrán: ‘El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra‘ podemos añadir la posibilidad de que esa mierda regrese a nuestra mente por algún motivo incontrolable.

¡Esas cosas pasan!

En tal caso… repetimos la operación.

En fin, esta entrada ya está llegando a su fin esperando que la hayas disfrutado, aunque se trate de un tema un tanto escatológico.

Muchas gracias por tomarte el tiempo de leerla hasta el final.

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